El fútbol une a Argentina esperan la victoria cuando se enfrenten a Holanda en los cuartos de final de la Copa del Mundo.
Buenos Aires, Argentina – Bajo una pancarta azul y blanca que decía “Ningún jugador es tan bueno como todos juntos”, un trío de adolescentes hizo piruetas con una pelota de fútbol.
En el otro extremo de un antiguo club deportivo y social llamado Eros, ubicado en el barrio de Palermo de Buenos Aires, otro grupo, de aproximadamente la mitad de su edad, pero con el doble de energía, lanzó el balón a la portería.
La acción en Buenos Aires se produce cuando la selección nacional de fútbol de Argentina se prepara para su partido de cuartos de final de la Copa del Mundo contra Holanda el viernes en Qatar.
Es un enfrentamiento entre dos grandes naciones del fútbol en un torneo que ha visto a varios gigantes enviados a casa por desvalidos.
Dirigida por Lionel Messi, Argentina era una de las favoritas de cara a este Mundial. Un susto en el partido inaugural contra Arabia Saudita hizo tambalearse a los fanáticos, que habían estado apostando por algo de alegría en medio de la agitación económica en casa.
Sin embargo, los ánimos vuelven a estar más altos, ya que el equipo ha mostrado actuaciones cada vez más fuertes, con destellos de brillantez de Messi y sus compañeros de equipo.
“Nervioso”, resumió sus sentimientos Matías, de 15 años, uno de los chicos que juega en el gimnasio del Eros.
“Siento que Argentina puede llegar a la final. No diré que lo ganemos todo, porque no quiero gafe, pero podemos llegar allí”, dijo.
Una transmisión en vivo en Twitch del ex futbolista Sergio Agüero con Messi y otros miembros del equipo obtuvo 250,000 espectadores.
“Pase lo que pase, para mí todos ustedes son personas fenomenales”, dijo Agüero al grupo. “Tu victoria siempre me hace muy feliz porque también es la mía”.
También existe la superstición que acompaña a la Copa del Mundo.
Los argentinos replican comportamientos que llegan a asociar con ganar juegos. Los chicos de Eros tenían todos los suyos: Matías usa los mismos shorts y medias que tenía durante las victorias. Santiago va al mismo restaurante y se sienta en la misma silla con las mismas personas para cada juego.
La Copa del Mundo es una fuerza unificadora en Argentina, dijo Viviana Vila, una veterana periodista deportiva.
“Es el único momento en el que todos nos quedamos paralizados para vivir la misma emoción”, dijo Vila, quien se convirtió en la primera mujer argentina en hacer un comentario televisivo durante una Copa del Mundo en 2018.
“Puede ser alegría, o puede ser tristeza. Pero durante dos o tres horas, todos viviremos la misma emoción”.
Los argentinos replican comportamientos que llegan a asociar con ganar juegos. Los chicos de Eros tenían todos los suyos: Matías usa los mismos shorts y medias que tenía durante las victorias. Santiago va al mismo restaurante y se sienta en la misma silla con las mismas personas para cada juego.
La Copa del Mundo es una fuerza unificadora en Argentina, dijo Viviana Vila, una veterana periodista deportiva.
“Es el único momento en el que todos nos quedamos paralizados para vivir la misma emoción”, dijo Vila, quien se convirtió en la primera mujer argentina en hacer un comentario televisivo durante una Copa del Mundo en 2018.
“Puede ser alegría, o puede ser tristeza. Pero durante dos o tres horas, todos viviremos la misma emoción”.
Agregó que el equipo tiene muchas cosas a su favor más allá, por supuesto, de contar entre sus filas con la mejor jugadora del mundo.
“Son un grupo de jugadores que son completamente capaces de enfrentar estas circunstancias con un cuerpo técnico habilidoso, de clase mundial, joven y de bajo perfil”.
Después de su fracaso abismal en la última Copa del Mundo en Rusia, donde Argentina perdió ante los eventuales ganadores Francia en los octavos de final, el impulso ahora está del lado de Argentina, dijo.
“Este es el mejor Messi”, agregó. “La más madura. Es un equipo fantástico. La verdad es que hay que jugar cada partido. No hay mucho más que podamos decir al respecto”.
De vuelta en Eros, una gran bandera argentina cuelga sobre el gabinete de licores en el restaurante de la casa club, mientras los fanáticos zumban en el calor opresivo de diciembre.
Murales de Maradona adornan la fachada de 80 años del club. Una multitud de lugareños que se ha reunido aquí para animar cada partido de Argentina volverá el viernes, dijo el miembro del club Marcelo Krimer, de 39 años.
El fútbol representa todo lo que es bueno”, dijo, señalando que se refiere específicamente al deporte, no a los órganos rectores nacionales e internacionales que lo dirigen “como una mafia”.
En Eros, las familias encuentran comunidad y apoyo. A menudo tienen que obligar a la gente a salir por la noche apagando las luces.
“Esto es oro para la infancia”, dijo Krimer, mirando a los niños que jugaban en el gimnasio. “Nos ayuda a olvidarnos de todo. Siempre digo que venir al club, a este espacio, es como sacarte el cerebro y ponerlo en un cubo de hielo”, sonrió. “Luego te vas y vuelves a tu vida, a tu familia, a tu trabajo”.
Para Jorge del Río, de 70 años, el club es un oasis en una jungla de cemento. Ha dirigido una escuela de fútbol para niños en Eros durante 30 años. En una ciudad como Buenos Aires, “el potrero”, donde gente como Maradona cultivó sus habilidades, casi ha desaparecido, dijo.
“Solíamos jugar en la calle y pasaba un auto de vez en cuando”, dijo. «Ya no puedes hacer eso».
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