En una jornada cargada de solemnidad y simbolismo, la Princesa de Asturias, Leonor, celebró su mayoría de edad cumpliendo con sus obligaciones institucionales. Después de jurar la Constitución en el Congreso de los Diputados, los actos se trasladaron al Palacio Real, donde la Princesa recibió el Collar de la Orden de Carlos III otorgado por el Gobierno.
En un emotivo momento, Leonor agradeció la condecoración y se comprometió a incorporar el lema «virtud y mérito» a su condición de «Princesa de Asturias y Heredera de la Corona». La joven reflexionó sobre su responsabilidad con los principios democráticos y los valores constitucionales, prometiendo servir con respeto y lealtad a todos los españoles. En un gesto de confianza, expresó: «Les pido que confíen en mí, como yo tengo puesta toda mi confianza en nuestro futuro, el futuro de España».
En el Palacio Real, el Rey Felipe VI recordó la importancia del acto para la historia de España y destacó que su hija no estaría sola en su camino. El Rey instó a los ciudadanos a preservar los valores democráticos y la libertad, subrayando que la democracia se construye día tras día.
El día estuvo marcado por la solemnidad y la emoción, con Leonor jurando cumplir y respetar la Constitución y revalidando la alianza entre la monarquía y el parlamento. El acto concluyó con un ferviente «Viva la Constitución, Viva España, Viva el Rey».
Leonor, que llevaba años preparándose para este día, demostró su compromiso con España y su determinación para asumir su papel como Heredera. La ceremonia culminó en el Palacio Real con la entrega del Collar de la Orden de Carlos III, simbolizando su creciente responsabilidad en la vida institucional del país.
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